COLON - MANZANILLO

Lunes 19 de diciembre

COLON

Nos despertamos bien temprano con la intención de viajar en el tren hasta Colón ya que por ser domingo el día anterior no pudimos comunicarnos telefónicamente con el agente naviero, pero en teoría la Gordi ya estaba en Panamá.

Para nuestra alegría y para que no la extrañemos la LLUVIA empezó a caer torrencialmente sobre Panamá, fue una odisea conseguir un taxi, cuando finalmente logramos treparnos a uno, el chofer muy agradable nos dijo que no tenía idea desde donde salía el tren porque habían cambiado las oficinas de atención, entonces comenzó a bajar la ventanilla para preguntarle a otros colegas, entre tanto una pasajera “se subió “ al asiento de adelante del taxi, todo bajo la lluvia, los limpiaparabrisas a mil, no se veía nada, le dijimos, no importa llevenos a la terminal de buses para tomarnos un expreso.

A pesar de la lluvia y los “tranques” (congestionamiento de tránsito)  llegamos a Colón a las 8,15 y llamamos desde la terminal a W&W, la empresa de logística encargada de la Gordi, hablamos con Joel Martinez  que nos dijo efectivamente que ya estaba el barco en puerto pero que íbamos a tener que buscar un cheque certificado por u$s 30 a nombre de la empresa, según él lo podíamos obtener en el Banco Nacional, o el HSBC, y un par más.

Fue allí que con Daniel comenzamos a caminar por Colón en búsqueda del famoso cheque bajo una torrencial lluvia que además de empaparnos nos puso de mal humor, encima NO PUDIMOS conseguir el famoso cheque ya que para ello debíamos ser clientes del banco, cosa que lógicamente no somos ya que somos extranjeros. Finalmente derrotados después de recorrer 3 bancos decidimos llamar nuevamente a Joel, entonces pedimos en el banco moneditas para usar en el teléfono y a la calle a buscar teléfonos públicos. El primero nos dijo “ese número no corresponde a un abonado en servicio”, pensamos, no anda el aparato si recién hablamos, vamos a otro……..sorpresa, nos dijo: “ese número se encuentra fuera de servicio”, oh, oh probamos con un tercero y lo mismo. Teniendo en cuenta que entre un teléfono y otro había no menos de 2 cuadras y que nuestra “amiga” la lluvia nos seguía castigando decidimos tomarnos un taxi e ir a Manzanillo a explicarle personalmente al buen Joel que lo del cheque no era posible.

Quienes conozcan la ciudad de Colón entenderán lo “placentero” que es caminar por sus calles!!!

Para quienes no la conozcan les contamos que Colón es una feísima ciudad,  las calles repletas de basura, trastos tirados por todos lados, vendedores ambulantes, miles, edificios derruidos super poblados, en fin, una pinturita.

El taxista que nos llevó resultó muy cordial y nos dejó justo ante la puerta del edificio para que no nos siguiéramos mojando. Cuando llegamos a W&W, Joel estaba ocupado en otra oficina, nos sentamos a esperarlo pero nada, finalmente entró a la oficina Tracy quien nos  atendió y al explicarle nos dijo: “Ah si,  ya sabíamos que a los extranjeros no les dan el cheque, no se hagan problema por ser ustedes traigan los u$s 30 en efectivo (casi nos dá un ataque!!!! Recontra mojados y cansados de las colas en los bancos para nada!!!!) Igual van a tener que volver mañana porque la lluvia atrasó los trabajos del puerto”

Nos tomamos un taxi desde Manzanillo, hasta la plaza decruceros, un lugar muy agradable comparado con el “centro” de Colón donde nos comimos un pizza en EL Libanés y después nos fuimos a Panafoto (en el mismo lugar) a mirar cámaras fotográficas.

Nos tomamos un bus de regreso, (seguía lloviendo), y lo que a la mañana nos llevó 1 hora 30, ahora nos llevó 3 horas y media. Encima no tuvimos mejor idea que bajarnos antes para ahorrar camino  y nos dejaron en una avenida de la mano contraria a nuestra dirección, tuvimos que sacarnos el calzado para poder correr y cruzar, después pelearnos con varias personas para atrapar un taxi, nos pusimos separados uno de otro para probar suerte, capturamos uno. El taxi tan peleado estaba conducido por un señor de aproximadamente 70 años, quien pegadito al volante nos dijo, “Uy eso es muy lejos, pero vamos a llegar” tomó la calle por el centro y le dio para adelante a 20 km/hora, los demás le tocaban bocina, lo pasaban por la derecha, por la izquierda, lo puteaban , pero el señor inmutable seguía por el centro de la calle a 20 por hora. Un maestro!!!!! En algún momento Daniel tuvo la intención de decirle: NO quiere que maneje yo? Jejejeje, pero no lo hizo por la buena onda del viejito y por respeto a las canas.

Finalmente llegamos al hotel  riéndonos de nuestro agitado día, empapados y cansados.

Martes 20 de diciembre

A BUSCAR LA GORDI…..

Nos levantamos a las 5 de la mañana, tomamos el primer bus y a las 8 en punto estábamos en W&W con los u$s 30 y toda la ansiedad por los trámites que vendrían.

Joel, ya nos estaba esperando con el BL original, algo así como el pasaporte de la Gordi y nos deseó suerte con los trámites, nos dijo donde estaba el primer punto y asi allí fuimos.

Ni bien arribamos al lugar decenas de gestores se acercaron a ofrecer su servicio, pero divisamos a  María , una joven que habíamos conocido el día anterior en W&W y la llamamos para darle a ella la changa.

Nuestro periplo dio comienzo a las 8:30 aproximadamente, primero obtener el seguro obligatorio (taxi hasta el centro comercial plaza de cruceros) fuimos a Mapfre, nos querían cobrar u$s 100 por un seguro de un mes, no dijimos, no hemos pagado nada ni cercano a esa suma en ningún país. Otro taxi hasta la plaza Colón 2000 y allí la compañía de seguro FEDPA , compañia estatal de Panamá, nos cobraron u$s 15 por el mismo seguro.

 Otro taxi, y van 3, hasta la Aduana Internacional, allí la atención fue rápida y eficiente, fuimos atendido por otra María, que como las anteriores resultó muy amable y diligente. Tuvimos que presentar el seguro, el pasaporte, copia del título, del registro, etc.

Terminado ese trámite, otro taxi (4) hasta la otra aduana de donde partimos, allí más de 60  minutos de cola, y de no haber sido por la gestora que iba gestionando con otros los papeles hubiésemos estado 4 horas, teníamos 7 personas adelante a un promedio de30’ por persona, finalmente logramos los sellitos en los papeles y a buscar a la Gordi!!!!!

En total entre gastos de aduana, fumigación, fotocopias, taxis, gestora y demás menudencias pagamos u$s 140.

Ultimo lugar, la playa de estacionamiento del puerto, allí estaba ella esperándonos, la verdad la extrañábamos.  Encontramos todo bien a excepción de un hermoso ventilador, recién comprado, atornillado a un mueble, del que seguramente “alguien” se enamoró y se lo “llevó”, en fin “que se abanique”.

Ahi nos esperaba la Gordi!!!

A las 12 del mediodía ya estábamos regresando a Panamá, en una hora estábamos en la puerta del hotel, la estacionamos al frente y después de almorzar nos dedicamos a reacomodarla ya que Dani había metido adentro del baño casi todo lo movible, otro poco en el baúl cerrado con trabas, y en algunos muebles con candado, la tuvimos que limpiar y acomodar. Pero ya estábamos listos para seguir viaje.